martes, 27 de diciembre de 2011

Esa noche nos follamos, en vez de hacer el amor.

Allí me quede, sola, como siempre me había sentido, con el teléfono en la mano esperando tu perdón. Pasaba el tiempo y ahí estaba yo; llegue a pensar que me había vuelto loca, y así era. En aquel rincón, con ese vestido corto que tanto odiabas, y tus palabras todavía flotando en el aire, una corta despedida y un portazo; Nos venció el orgullo y no fuimos capazes de apurar el veneno que en ese momento nos recorría por dentro, ninguno de los dos. Y pude comprobar que, ni tú me querias tanto y que ni yo te queria tan poco.
Yo, que hubiera prendido fuego a la lluvía por ti

1 comentario:

  1. Omsss( Me encanta como escribes, cada una de tus palabras, y me encanta el final de esta entrada.
    Me encanta pasarme por aquí, y me gustaría que te pasaras por mi blog más a menudo porvorrr:

    http://www.carpediemenestadopuro.blogspot.com/

    Tengo otro nuevo, más simple, sigueme si quieres:

    http://www.sunisupincalifornia.blogspot.com/

    ResponderEliminar